viernes, 8 de enero de 2010



Hay algo más que esos químicos imperceptibles y etéreos.
Está en la esencia de las noches glaciales. En mi constante expectativa del apego hacia las temperaturas elevadas.
Mi suerte puede retornar con esos carámbanos; más fervor, menos desvínculos.
He sido arrancada de la ilusión por leones bárbaros, pero siempre reintegro las promesas.

Promesas no únicas, promesas manchadas de picardía.
Fascino con los tintes en la bóveda que encierra la vanguardia.
No quiero necesitar interés viril.
No mañana, no ayer.

Sin embargo el suplicar de la brisa me desquicia.
NECESIDADES, NECESIDADES.
Reñir con la existencia por estas.
Si tan sólo fuera oquedad y falta de meollo, confortable sería inhalar.



Turbulencia: Arráncame esta lluvia con rayos que despojen mi piel, tramposa es esta y aún guarda aspectos tullidos.

1 comentario:

Bull dijo...

estoy muy dormido para entender, y sin embargo, me gusta tu redaccion

Mitoteros